Diabetes
La diabetes es una condición en la que el cuerpo no puede regular adecuadamente los niveles de azúcar en la sangre. Esto ocurre cuando el páncreas no produce suficiente insulina (la hormona que ayuda a que el azúcar entre en las células para ser utilizada como energía) o cuando las células no responden correctamente a la insulina que se produce. Como resultado, los niveles de azúcar en la sangre pueden ser demasiado altos, lo que puede causar una serie de problemas de salud a largo plazo.
Hipertensión
La hipertensión es una condición en la que la presión arterial en las arterias es más alta de lo normal. Esto significa que el corazón tiene que trabajar más duro para bombear sangre por todo el cuerpo. Si no se controla, puede aumentar el riesgo de enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares y otros problemas de salud graves.
Enfermedad renal crónica
La enfermedad renal crónica es una condición en la que los riñones no funcionan adecuadamente durante un período prolongado. Esto puede ocurrir debido a diversas causas, como la diabetes, la hipertensión, enfermedades autoinmunes o problemas genéticos. Cuando los riñones no pueden eliminar los desechos y el exceso de líquidos del cuerpo de manera eficiente, pueden acumularse toxinas y causar daño a otros órganos.